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viernes, 30 de diciembre de 2016

Cronos

El tiempo gira
como una ruleta sin mesa
ni croupier.
Como un planeta alazán
sin sol ni jinete.
El tiempo gira y nos arrastra;
apenas podemos calcular sus pasos,
pero no su consecuencia.

Lo hemos dividido artificial
y arbitrariamente
como un mapa lleno de líneas
y coloreado.
Marcamos el punto
donde el tiempo acaba y se reinicia.

Hemos dominado al tiempo
para hacernos sus esclavos.
Cronos
sigue
devorando hijos.

martes, 27 de diciembre de 2016

Walt

¡Arrancad los cerrojos de las puertas!
¡Arrancad las puertas de los goznes!
Walt Whitman

Siempre hay que volver
al tío Walt.

La poesía es una llave
pero no es la cerradura.

Cuando la tentación era el discurso
grave y elevado,
el tío Walt bajaba la mirada
y buscaba la belleza
en las cosas rotas.

La poesía es una llave
hermosa
pero no es la puerta.

Siempre hay que leer
al tío Walt.

Cuando en los manuales te digan
que la poesía es un artefacto
perfecto,
armonioso,
matemáticamente elaborado
e inútil;
recuerda:
la poesía es una llave
para salir al universo.




Querer

Se trata de querer
más allá de todo límite
Se trata de hacer
en la medida en que se quiere.

La mirada siempre vuela
aunque los ojos caminen.

X

la vida
es una incógnita
sin ecuación


lunes, 26 de diciembre de 2016

Y

conjunción que junta
falsa helénica que trabaja a destajo
y
que se cuela
como cuña buena
como abrazo
entre tu nombre y el mío
para hacer
nos.

Aprendiendo a ser hombre

Ocurre que uno todavía está
aprendiendo a ser hombre.
Desaprendiendo las miserias,
las oscuras ruindades.
Ocurre que uno atisba el fondo
y en el fondo sabe
que estaba equivocado.
Ocurre que cuando el miedo da tregua
uno se ilumina de repentina lucidez,
como cuando la dorada última luz
anterior al crepúsculo
delgada nos dibuja las copas de los árboles
y los gorriones se detienen
fotográficos
en vuelo.

Ocurre por un instante,
una suspensión del transcurrir,
una íntima epifanía
que nos revela toda la verdad del universo,
la cual, por supuesto,
no llegamos a comprender,
pero vemos.

viernes, 23 de diciembre de 2016

Sueños

No hay nada más frágil
que un sueño roto,
no hay nada más fuerte
que lo que ya se rompió.

Tenés en tus manos mis sueños
como fuertes herramientas,
como finos instrumentos;
tenés en tus manos los vientos,
tenés en tus manos las tormentas.

No hay nada más intenso
que soñarte despierto,
no hay nada más suave
que besarte en sueños.

Moriré unas horas esta noche
para poder ver tus ojos en el día.
Arderá mi rostro al sol todos los días
para dormir a tu lado cada noche.

No hay nada más frágil
que el recuerdo de un beso,
no hay nada más fuerte
que sus lazos de hierro.

martes, 20 de diciembre de 2016

ñatos

el gimnasio es tu casa.
allí se encuentran todos, se conocen, se respetan.
pero el ring…  el ring es otro espacio.
ahí estás absolutamente solo.
te podrán gritar, pero vos recibís los golpes,
vos los das.
enfrente el otro es un espejo.
te mira, te esquiva, te tira golpes
como para derribar la pared que lo separa del éxito.
está entre vos y la gloria.
entre vos y terminar de una vez.
son tres minutos eternos.
son tres minutos efímeros.
al final, si los dos siguen de pie,
al sonar la campana, hay que saludar.
el otro es un rival,
jamás un enemigo.
el otro es un ñato como vos.
y sólo entre ñatos saben
de qué va esta cosa.

lunes, 19 de diciembre de 2016

Náufragos. Publicado en Letralia el 18/10/2004

http://www.letralia.com/116/letras03.htm


Como náufragos bogamos por el mar,
El hogar desechado por los vivos.
Como seres que la bruma ha perdido,
Emprendemos la ventura de soñar.

En la noche sin estrellas del azar
Navegamos sin fuerza, sin sentido,
Sin puerto al que llegar, sin amigos;
Con los remos en silencio hiriendo el mar.

Consolaos terrestres caminantes
Que los náufragos son lejos de casa:
Son luces que os brillan en el alma.


Ya lejos los fugaces navegantes
Sólo bogan, no saben lo que pasa:
Han quedado por siempre en otra calma.

sábado, 17 de diciembre de 2016

Univers Àgatha

La vida te regala amigos que uno jamás esperaba. Gente generosa, solidaria, respetuosa; gente con la fuerza de mil guerreros en las más fieras batallas, las más hermosas. Hay cierto catalán, poeta, padre, guerrero, que ha creado un universo de amor para su niña. Poder apoyar su lucha, su hermosa batalla, es de las cosas más lindas que me han pasado. La vida te regala cosas que uno jamás esperaba.

http://www.universagatha.org/

jueves, 15 de diciembre de 2016

Caja de cartón

Una palabra basta,
una imagen,
apenas una caja de cartón
y tu recuerdo ronronea,
se nos trepa a los hombros,
nos besa.
Y lloramos de la felicidad de haberte conocido.

jueves, 8 de diciembre de 2016

Cubos

Cubos de cuatro centímetros de arista
elaboran matemáticas opiniones acerca de la creación.
Se espantan ante caóticas frases,
cuentan cada sílaba, la pesan en balanzas de feria.
Miden el golpe del acento como si el verso fuera
una marcha militar.
Y decretan que tal roca es un poema,
que tal pluma es una prosa
desdibujada.

Consideran que debemos hacer
versos a medida, ritmos calcados
de viejos textos, temas heredados
con helénicas formas. Conocer

lo que nos es dado. Dicen saber
de la poesía más que los hados;
dicen que ya estábamos inventados,
que nuestra voz no puede trascender.

Viejos cubos de Rubik con corbata
dictan sobre lustrados escritorios
las leyes que dominan, según ellos,

la creación. Su prédica arrebata
libertad. Nos encierra en territorios
de oficina, colgados como sellos.

Pero la poesía tiene muchas caras
y no todas son musicales y rítmicas.
La belleza es una forma de decir en alta voz,
y un motivo en sí mismo.
Lo importante acá
es la palabra.
Es la palabra saliendo de mi tu boca,
llegando a tu mi oído.
Es el garabato en el papel que grita amor escrito.

Desde luego que acá, lo que menos importa,
es la opinión de un cubo de colores.
Por más académica y de número
que luzca su corbata.

martes, 6 de diciembre de 2016

Jornada

Mis pies descalzos caminan
sobre espadas encendidas.
El aire que respiro es el suspiro
de un dragón que visita mis pulmones.

Es una locura alejarme de tus ojos como lunas;
sé que debo hacerlo, dejar vida
para ganar vida,
recorrer este camino para ser camino.
Puedo hacerlo porque tus ojos/lunas son mi sol;
no este sol cangrejo que muerde mi piel,
sino la estrella que me dicta el rumbo.

Todo puedo hacer cuando tu voz me invoca;
sigo alejándome solamente
por la promesa de encontrarte
al final de la jornada.




jueves, 1 de diciembre de 2016

Avenida

La vereda me azota,
siento las baldosas como varas en los talones,
y el viento se mete en mi camisa
como una lengua impúdica.
Los faros de los autos ensucian la noche
con una luz líquida, tibia,
falsa como sonrisa de publicidad.

Hay estrellas como gatos
durmiendo en los contenedores de basura.
Hay ángeles que me miran
con imperiosa demanda de silencio,
sólo yo puedo verlos y desconozco la razón
de semejante privilegio.

A pocos metros, sobre las vías
que cruzan la avenida,
el recuerdo de un tren atropella la sombra
de un transeúnte que prosigue sin entender,
aunque se instaló para siempre en sus ojos
una llama de infinita soledad.

Abro la boca y reclamo
una bocanada de cordura;
faltan pocos metros para llegar a mi hogar,
ya puedo refugiarme entre las cálidas paredes
y abrazar a mi esposa, jugar con mi perro.
En mis zapatos arrastro una mancha de luz lechosa,
y guardo en mi retina un grito de árboles.
Faltan pocos metros.
Faltan.

domingo, 27 de noviembre de 2016

Odio VII

El odio despierta
como un espía dormido
cuando llega la consigna.
Transforma los rostros,
vuelve roncas las voces,
muestra la naturaleza monstruosa
que se esconde en el ocre margen
de lo humano.
El odio se mete como una cuña
entre el hombre y su cielo.

Huida

Flota en el aire
un hedor a perro muerto.
La primavera trae flores muertas
y noches frías,
hay días que no la salvan los jazmines
ni los barriletes.

Mi perro teme a los truenos,
huye de la comodidad del sillón
para refugiarse afuera, en el patio,
dentro de una cucha que es casi
una casa de balneario.
A veces también quiero huir.
Volver a los ocho años y esconderme
en la casa del árbol que nunca tuve
(mi casa del árbol eran árboles
pinos que se caían y que antes que pasaran a ser leña,
con mis amigos habitábamos
y reciclábamos en barcos, edificios, colectivos).

El hedor me espanta.
También me rememora la niñez,
cuando caminábamos y descubríamos alguna osamenta
a la vera de la calle de tierra.
Podría haber sido un auto,
o los soldados de la base aérea probando puntería.
Entonces quería huir, ser adulto, vivir en otro lado.

La primavera siempre vuelve. No siempre es bella.

Pero siempre es.

sábado, 26 de noviembre de 2016

El buen ciudadano

El buen ciudadano paga sus impuestos,
levanta sus mañanas con el café,
hojea periódicos, hace pronósticos
y se lanza a la calle en un automóvil
que empieza a sentir demasiado pequeño.

El buen ciudadano oye en la radio voces
que le dicen qué pensar, como vestir,
de qué se debe reír. Esas palabras
pronto son suyas, las repite, las cree.

El buen ciudadano justifica su ira,
es sana indignación ante las ofensas
de los demás. La ira del otro es violencia
(el otro es otro), debe ser condenada.
El prójimo es su colega, su vecino.
El otro no es prójimo, es algo lejano.

El buen ciudadano habla a su hijo, le enseña
que debe haber fronteras en todo mapa.
(En el mapa de la ciudad las fronteras
deciden la vida, la verdad, la muerte).

El buen ciudadano levanta la voz
y repite las palabras instaladas
en su cabeza por la prensa. Celebra
entonces las muertes ajenas. Olvida
que todos somos mortales. Luego duerme,
en paz. Sabe que él es un buen ciudadano.

viernes, 25 de noviembre de 2016

Humo

Somos humo, liviano, prisionero
en cápsulas de cristal delicado;
un hermoso frasco frágil, delgado.
Somos humo luminoso, ligero

destello sin fin en finito cuero.
Nuestro don es fluir, como Ícaro alado
volar y caer, volver encerrado
en un envase. Ser luz, ser acero,

ser humo en una lámpara y volar.
Somos la materia de sueños viejos
que vuelven a contarnos su cantar.

Somos parte de una luz, los reflejos
de una luz eterna. Hemos de brillar
por siempre. Somos únicos espejos.


domingo, 13 de noviembre de 2016

demonios 2

Hay un demonio de moño negro en mis extrañas entrañas.
Habita la perdida región del alma
que solo visito cuando me duele.
El hígado, claro.
Amargo como cronista de policiales,
me jode la existencia en cada oportunidad.
Ahora por ejemplo me dice que esto es prosa,
que me deje de joder con el salto del renglón.
Este demonio no pronuncia, muerde.
Sólo le salen bien las palabras “mío” y “yo”,
sospecho que inventó los lunes y la propiedad privada.
Puede ser gracioso, es fácil ubicarlo en un otro,
(ese “no yo”)
y burlarme como catarsis invertida,
desconociéndome.
Pero a veces envenena mi sangre
y mi lengua con tonos ocres, acres.
No soy yo, me digo y me miento. Soy yo.
Soy mi demonio de moño negro,
y no me causa gracia verme bailar su danza ridícula.
Combato a mi demonio, convivo con su sombra.
Apelo a los arcoíris de la memoria,
para saber que el otro soy yo mismo,
que puedo esconder mi demonio en sus infiernos
que puedo salir al sol y ser prójimo
de mis hermanos.

martes, 8 de noviembre de 2016

media luna

Los buitres vuelan sobre los pozos de sangre manchados de petróleo.
No hay alondras anidando,
Sherezade se ha vuelto muda y no puede convocar pájaros.
Los antiguos zigurats proyectan su sombra,
y a sus pies numerosas lenguas confluyen como ríos.
Los buitres posan sus garras en la biblioteca destruida.

El horror visita las calles en una lluvia de fuego.
A lo lejos se escucha la imprecación de predicadores de la muerte,
escupiendo sobre el libro sagrado.
El otro libro sagrado también llora,
le han amputado las palabras “amor” y “piedad”,
ya no puede caminar sin sus pies.
Los libros lloran como niños arrancados de sus madres,
Ancianos de dientes amarillos los prostituyen,
mienten de sus páginas gritos de odio
que jamás fueron escritos.

La media luna no mana miel y leche,
mana petróleo manchado de sangre.




domingo, 6 de noviembre de 2016

Anticonsejos

La cobardía es asunto
De los hombres, no de los amantes
Silvio Rodríguez.

Si querés hacer poesía, querido niño,
tenés que sangrarla. Parir cada verso
y luego romperlo en pedazos.
Para hacer poesía tenés que hacer
artesanía, filicidio, arte cruel, amor sagrado.
Juntar los pedazos de tus heridas
y volver a mojarlos con sudor.
Dejate las manos y los ojos, que te duelan
como un round final contra la muerte.
Buscá la perfección y cuando la encuentres
volvé a romperla.
Para hacer poesía
jamás desnudes tu alma
a los putos críticos.
Ellos son buitres impotentes,
caricatura del arte en harapos de colores.
Para hacer poesía, mi niño
tenés que despreciar los laureles,
la palmadita en la espalda en el boliche,
el prólogo servil del consagrado.

Para hacer poesía, mi niño,
tenés que hacer
la revolución; la poesía no es asunto de cobardes
ni de tibios.

Finalmente reíte de los consejos.
No hay como los errores propios;
los viejos poetas aprendieron de los suyos,
luego se sientan, borrachos, y escriben:

“si querés hacer poesía, querido niño...”.

lunes, 31 de octubre de 2016

vereda

Camino por una vereda de baldosas ajenas.
Me repelen los carteles, las luces de los autos me ladran
como perros hambrientos, cimarrones, heridos.
No me pertenecen siquiera las sombras que proyecto,
multiplicadas copias paródicas de sucios grises.

Sólo soy dueño de mis pasos.
Sólo soy dueño del impacto de mi pie en el mundo hostil
en esta ciudad privada de cemento y luces frías.
Desgasto mis zapatos caminando el precio de la libertad.


domingo, 30 de octubre de 2016

mis muertos

Mis muertos me persiguen,
me reclaman las mentiras, los odios adioses.
Exigen que no los use más como pretexto
de un texto abortado.
Que mencionarlos no es recordarlos,
que para honrar la memoria es preciso vivir.

Mis muertos son las alas que recorto
en un ritual cotidiano y perverso,
para entregarlas al mísero demonio de lo posible.

Mientras traiciono a mis muertos,
traiciono a mis vivos.
En una paradoja absurda de carrusel infinito.

He de vivir, aunque no sepa cómo.
Nunca llegaron las instrucciones
y los sucedáneos no llegan ni a la tapa.

He de vivir, entonces, improvisando.
Besando cada día la flor de los labios que amo,
haciendo una experiencia de cada página leída,
de cada caricia del sol, cada cuchillo del día.

He de vivir caminando junto a mis vivos,
he de caminar junto a mis muertos.



jueves, 27 de octubre de 2016

Bajo corteza

Bajo corteza
el árbol se protege
y la belleza.

Y la belleza
esconde su profunda
naturaleza.

Naturaleza
renace cada día
bajo corteza.

lunes, 17 de octubre de 2016

Ojalá

“Farai un vers de dreit nien”
Guillermo de Poitiers, (1071 - 1126)


Ojalá pudiera hacer un verso
sobre absolutamente nada.
Ojalá tuviera la pericia, ser un guitarrista
formidable del verso,
un poeta de barba florida y mágicos dedos.

Hoy la tendencia es hacer prosa
sobre absolutamente todo.
Enchufarse a pantallas que viven
más que sus extensiones de carne.

A veces envidio esa vieja escuela
del viejo Darío,
amante de cisnes y parnasos,
de milimétrico conteo de sílabas tónicas,
de aliteraciones líquidas, límpidas, líricas.

Pero estos dedos son lo que me tocaron.
Estos dedos que duelen como cuchillos
con el filo hacia dentro
y ríen como niños descubridores.

Ojalá pudiera multiplicarme,
ser yo y el poeta,
hacer un verso hermoso,
que se cuele en tu pelo como una flor
y te acompañe luminoso y diáfano.
Ojalá pudiera hacer un verso
sobre absolutamente todos los versos
que te componen.

viernes, 14 de octubre de 2016

Flecha

Hay días que no tengo palabras que decir,
que sólo me sostengo por puro movimiento
irracional; no pienso, apenas vivo y siento
el aire que me besa, como flecha al morir

cuando vuela a su blanco. ¿Qué puedo describir
que tus ojos no vieran? ¿Acaso un pensamiento
puede ser bueno o nuevo? Si lo digo lo miento.
Cada palabra dicha renace al repetir

su sonido y sentido como un mantra. Mantengo
la esperanza; mañana es un nuevo desafío
para renovar vuelo, para decir lo nuevo,

para contradecirme, para hacer lo que tengo
que decir. Ser la flecha y la diana; ser el río
y el mar. Porque palabras es todo lo que llevo.

lunes, 10 de octubre de 2016

reflexión

Es la hora y todos salen
sin hacer preguntas al reloj.
El tipo se acomoda en la vereda y agradece
el sol de octubre y la tibieza en sus riñones.
Come sin ganas el arroz
y se descubre en un reflejo fugaz
de un resplandor en su botella.
En ese instante piensa
en el sinsentido de la vida;
piensa que piensa demasiado,
que el descanso no descansa
y que media hora no alcanza
ni para sentir angustia
de estar vivo.

A su lado sus compañeros se levantan
no hay reflejos ni sombras
solo la promesa de la hora
que cierra la jornada.


martes, 20 de septiembre de 2016

Nos hacen falta poetas

Nos hacen falta más poetas
que televisores.
Poetas que se hundan
en la mierda de la ciudad
sin ensuciarse,
que celebren nacimientos
y se rompan las manos cargando ladrillos.

Las cajas no lloran con nosotros
las pequeñas tragedias cotidianas.
No festejan goles de barro
ni elevan nuestras torpes palabras
a la música celeste de los ángeles.

Necesitamos poetas
que no se vendan al mármol
ni firmen autógrafos a dictadores.
Necesitamos poetas que viajen
en ómnibus grises
y que distingan a cada pájaro
por su trino.
Necesitamos poetas que devuelvan
su valor a la palabra pueblo.



sábado, 17 de septiembre de 2016

Sentidos

If the doors of perception were
cleansed everything would appear to man
as it is, infinite”
William Blake


Si prestás atención podés oír
el murmullo de las alas
del colibrí
atravesando el ruido de la ciudad.
Con ojos libres
podés ver el amanecer de otra costa
cuando en tu horizonte descanza el sol
en rojos destellos de hasta luego.
Sobre tu piel también vibra
la caricia suave de un día
no anunciado todavía.
En tu lengua vive
el sabor de un pan recién horneado
en las páginas de un libro.
Tu nariz distingue el jazmín
en aquel balcón y la sal de océanos
cinematográficos.

Es cuestión de abrir las puertas
y dejar que el viento limpie;
se trata de contaminarse
un poco de infinito, de oír
esa voz extraña en tu garganta que dice
“yo soy el viento”.




lunes, 12 de septiembre de 2016

veces

otra vez la lluvia
para lavar de presente la memoria

otra vez el humo
de sueños incendiados
golpeando como puños
mis lentes de ver fotografías

otra vez el viento
comiendo su cola
trayendo ecos de un mañana efímero
mintiéndome
o
no

otra vez la grieta
abriendo el suelo
lamiéndome los pies
como una boca hambrienta
como una herida que nunca
cicatriza

una y otra vez
se repiten los días
se suceden las noches
con rabiosa porfía
con oscuros derroches

una vez y otra
soy libre de prisiones

otra y una vez
soy preso de visiones


jueves, 8 de septiembre de 2016

La noche herida

Atravesando la noche herida,
los trabajadores retornan
como soldados de una guerra perdida.
Cada uno abrazado a su dolor
silban una canción sin melodía.
Los últimos ángeles se han jubilado,
sin embargo florecen sonrisas
sin aparente motivo
y a pesar del mal clima.

Atravesando la noche herida
algunos trabajadores vislumbran
que la guerra no está perdida.

jueves, 1 de septiembre de 2016

funambulista

camino por fe
como un funambulista que se sostiene
imaginando la cuerda bajo sus pies
imaginando el cielo sobre su cabeza

camino sin semáforos ni puntos ni comas ni baldosas
escandalizando a inspectores y a gramáticos
camino consciente del vacío que me grita que voy a caer
con el corazón apretado por el puño de un ángel corrupto

pero no me detengo
¡sería tan fácil!
pero no
es una oferta tentadora descansar y volar
pero no
caminar es la fe

cuando el puño maldito se cierra
cuando mis párpados aflojan y tiemblo
por todos lados llegan voces
mi madre susurra ¡adelante!
la mujer más fuerte del mundo
sostiene mi mirada
mi hermana late al compás del corazón oprimido
hay amigos de cuatro patas que siguen conmigo
allá adelante me dicen ¡hola tío!
y ya está

no hay otra solución
no hay gramáticos ni lógicos ni peros ni siquiera inspectores
no hay putos semáforos en rojo ni mierda que me detenga

sigo caminando por las nubes
porque es la única forma
de caminar

lunes, 29 de agosto de 2016

Gala

I

El dolor
es una circunstancia;
acontece
como un beso o un terremoto.
Es una consecuencia ciega.
puede dar vida
pero su esencia no tiene voluntad.

El amor
es una fuerza inexplicable;
es irreductible a experiencias
pero se manifiesta en ellas;
su existencia
es empírica y sólida.
El amor duele en los adioses,
en la palabra maldita,
en la soledad abrupta y absurda
como una colisión ferroviaria.

II

Fuimos bendecidos
por la compañía de una criatura mágica
que conjuraba toda soledad,
todo momento oscuro y terrible
y con un ronroneo tibio
alejaba el peligro.
El dolor de perderla
en esta existencia
es inefable y profundo como un
pozo en el alma hacia la nada.

Sabemos
aunque no consuele
que renacerá en otra existencia
y seguirá brindando amor,
porque es parte del ciclo sagrado.
Su recuerdo
nos sigue construyendo
y sabemos que con el tiempo
ha de conjurar
también
este dolor como piedra
hasta volverlo nube.

El truco
está en recordar
con alegría,
el truco está en amar
sin condiciones.

lunes, 22 de agosto de 2016

Galadriel

Desde que una tibia gota de pelo
durmió en mi mano,
minúscula y hermosa
supe que nada sería igual.

Llegó y ese día fuimos familia.

Aprendí que la belleza
y la gracia son regalos y como tales
invaluables.
Aprendí que el silencio dice,
que estar es necesario,
que todo tiene su tiempo
y el tiempo de amar es el contacto con el alma.

Hay huellas que jamás se borrarán,
hay ojos que buscaré en cada vida
aún sin recordar su por qué.

Seremos un poco más viejos y un poco más pobres,
pero la gracia seguirá poblando estos rincones
como un suspiro de ángel
que atará los cielos y los sueños.

domingo, 21 de agosto de 2016

Con las palomas

A veces me pregunto para qué,
como si necesitara respuesta.
A veces la pregunta que molesta
encierra más verdades que la fe.

A veces me cuestiono si ya sé
los arcanos del arte, si acaso esta
senda es mía. Sólo sé que me cuesta
sangre cada verso. Sé que no sé.

Sin embargo vuelvo a la poesía
como un mendigo al pórtico de un templo,
y allí recibo, de la policía

del verso una patada, para ejemplo
de los ácratas. Me dicen "no comas",
por eso comparto con las palomas.

domingo, 31 de julio de 2016

Un tibio sol

Hay días en que basta
con un tibio sol
para sentir que no se ha perdido todo.
Algunos días nos aferramos
a la esperanza de tener esperanza.

Hay otros días
en los que llueven adoquines
que ni siquiera nos matan.
En esos días el sol es una hoguera
donde se queman los sueños,
es un témpano que flota
sobre nuestras cabezas
como un cadáver errante.

Hay días en que estamos muy cansados
para saber cómo está el día.
Sólo tenemos
una certeza única,
clara;
una certeza sin fe
ni pretensiones.
Lo único que importa es levantarse
y construir
con paciencia de artesano
un tibio sol.

  

sábado, 30 de julio de 2016

Blanco

La pantalla me interroga. El cursor parpadea sobre el blanco que deja en segundos de ser inmaculado. Borro, no puedo aceptar mi propia estupidez y borro. Borr. Bor. Bo. B.
Retrocedo, indeciso. No puedo decir, pero hay cosas indecibles, inefables (no son sinónimos, pero casi). 
Como no tengo los nombres en los dedos, garabateo palabras innominadas. Anónimas. No son sinónimos ni de cerca.
La lengua se me va, no habla, no fabla, no fabula. No hay fábula, no hay cuento. No hay verso ni poesía. Versero, cuentero. ya ni me quedan títulos. Estoy como el papel que me gritaba su silencio en la Cónsul, aquella que aporreaba de pendejo en mi habitación de hippie. Estoy como la pantalla, blanco. Sin ideas, desideado. Desidia. Qué pobre lluvia de palabras parónimas que no mojan ni nombran.
Hay por ahí demonios que piden a gritos una crucifixión piadosa. Cruz y ficción, y a mí no me sale siquiera una ficción para atormentar a mis propios demonios, que han engordado tanto que ni siquiera se toman el trabajo de atormentarme. Hay por ahí ángeles que recorren descalzos kilómetros de sabanas por un litro de agua. Sistema métrico mortal, los matarán unos gramos de plomo porque sí, por pura práctica de la maldad. 
Y yo acá, sistema tétrico que dice mal, que no dice, que está indeciso, indeseable, indeleble a tintas que me salgan y me construyan. 
Blanco. Un puto blanco que ni para escribir sirve. Que se interroga demasiado, que va y retrocede. Retroced. 
Allá los ángeles, los demonios, las cosas y los nombres. 
Acá los dedos que lloran sin poder nombrar el dolor. Algo he de hacer, publicar, levantarme y vivir. Lavarme la cara y afrontar el día. Blanco manchado, contaminado de sol y sal, de vida. 

domingo, 24 de julio de 2016

Hospitales

Los hospitales se hacen con historias
que crecen y duermen en los pasillos
fríos. Hay milagros, llantos, anillos.
Hay grandes derrotas, pequeñas glorias.

Hay familias en vigilias, euforias
breves, dedos que fuman cigarrillos
ansiosos. Los muros son de ladrillos
y miedo. Las puertas son giratorias.

Los hospitales son blancos lugares
que los sabios prefieren evitar,
pero que eligen de ser necesario.

Los hospitales son el escenario
de necios, héroes, gozos, pesares;
son el espejo que odiamos mirar.

sábado, 23 de julio de 2016

Dejar facebook

Dejar facebook es como dejar de fumar.
Hace poco desactivé mi cuenta. Lo hice por una promesa: me prometí a mí mismo (qué disparate de redundancia en tan pocas palabras...) que si mi cuñado dejaba el CTI, yo dejaría facebook, y desactivé la cuenta (por las dudas no di un portazo, pero me estoy portando bien y no reincido). El argumento que me di (sí, ya sé que sería las delicias de cualquier psiquiatra, no es nada nuevo), es que no valía la pena perder tanto tiempo en una página web cuando la vida me reclama ahí nomás. Y aunque me da un poco de vergüenza decir que es una promesa, como si fuera un sacrificio significativo, lo cierto es que reflexionar ante lo valioso que es el mundo real y al mismo tiempo en su fragilidad, me dio una muy buena razón. Y un inicio.
Y sí, dejar facebook es lo más parecido que me pasó a dejar de fumar. Ando con los dedos inquietos por la calle, mirando el teléfono móvil a cada rato por si pasa algo, dudando en qué mirar primero cuando prendo la computadora. Y al mismo tiempo descubrí el tiempo (pucha que estoy jodido con la redundancia, hoy), así como un ex fumador descubre el olor de las flores. Estudio más, estoy más atento a lo que pasa alrededor, miro a la gente a los ojos cuando me habla y no bajo la cabeza al celular, mi jefe me ve hacer cosas interesantes en la computadora (todavía no me ve trabajar mucho, pero al menos es un comienzo). Sólo me falta adoptar la misma actitud que cuando dejé de fumar, o mejor dicho, no adoptar la actitud de misionero en plena campaña de mandato divino y no hablar en contra del hábito recién abandonado. Por las dudas, ¿vio? Quien le dice. Eso sí. Trato de andar sin encendedores en los bolsillos. Y borré la aplicación del celular. Ahora me dedico a llenar este blog de estupideces.
Lo lamento, querido lector. Cualquier cosa me puede hacer llegar una queja. Por facebook.

Míticas en elMontevideano

Nadie puede dudar del trabajo cultural que hace Hugo Giovanetti Viola a través de su página, elMontevideano. Un trabajo de una perseverancia de artesano, acercando a sus lectores autores que escapan de la prensa culturosa local, o que son mal y pobremente difundidos, en el caso de los más conocidos.
Me honra ser citado en su blog, ser difundido por este gran escritor y mejor persona. Me honra enormemente poder llamarlo amigo y maestro. Es de las cosas que me hacen sentir vivo y bien en este ambiente tan mezquino como es Tontovideo. Una ciudad que necesita urgentemente volver a ser Montevideo.
Les dejo a los dos o tres que entran a leer este blog (incluyendo a los señores del FBI que cada tanto entran a vigilarme, les ofrecería una taza de café pero va a llegar frío a sus oficinas de California).
Aquí está:
http://elmontevideanolaboratoriodeartes.blogspot.com.uy/2016/07/marcelo-sosa-miticas-3.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed:+Elmontevideano-LaboratorioDeArtes+(elMontevideano+-+Laboratorio+de+Artes)

viernes, 22 de julio de 2016

Radiografía del pelotudo

Es posible que el título llame a confusión, que al leer uno se pregunte de qué pelotudo se trata. Es que la palabra no necesita demasiada explicación, uno tiene una idea general de su significado; entonces pensamos en que un ejemplar que pueda llamarse pelotudo tuvo un accidente esperable y se rompió en varias partes. Y no habría ninguna sorpresa, justamente por lo esperable del caso.
Pero no, la pretensión de este artículo es intentar describir al pelotudo como tipo humano. Insisto, es más fácil ejemplarizar (pelotudo es Fulano, por ejemplo) que describir, pero vamos a hacer el esfuerzo.
Para empezar, hay muchos. Por todos lados. Se diría que estamos rodeados de pelotudos. Basta con salir a la calle y ver cómo manejan, con prender la radio y la televisión y ver cómo hablan. Está lleno de pelotudos, así que no podemos decir precisamente que sean una minoría, pero sí podemos decir que la condición de pelotudo (vamos empezando por ahí: pelotudo se nace, y se perfecciona con el ejercicio) no responde a situación social, origen étnico, ni siquiera a nivel de instrucción, porque usted, querido lector, podrá corroborar que hay muchos pelotudos profesionales. Es decir, que ejercen alguna profesión (también hay los que cobran por ser pelotudos, pero ese es un caso especial, como el de los conductores televisivos o radiales que todos conocemos).
Luego es una condición no genética, ni siquiera tiene que ver con determinado grado de inteligencia. No, tiene que ver con una actitud y una facilidad para elegir la peor opción posible frente a una situación dada. Por ejemplo, el tipo que en el medio de un embotellamiento se descarga en la bocina. ¿Logra algo? No. Y entonces, ¿para qué lo hace? Esa no sería la pregunta adecuada, ya que no hay un para qué: el pelotudo no piensa: hace. O dice, que es una forma especial de hacer (y una de las preferidas del pelotudo). La pregunta es por qué. Y ahí la respuesta sale sola, sin necesidad de más elucubraciones: el tipo toca la bocina en un embotellamiento porque es un pelotudo. Tan sencillo como eso. Ahora bien, estamos hablando del que habitualmente termina haciendo cosas así, no del que alguna vez lo ha hecho. Y es que, como una genialidad ocasional no convierte a nadie en genio, una boludez no te hace boludo (permítanme por un instante el sinónimo, aunque hay quien los distingue; es que cansa la repetición y conviene variar un poco).
Entonces vamos forjando una descripción: es alguien que no piensa. Que usa el sentido común como común y no como sentido. Y podemos ver que trasciende el ámbito rioplatense del término. Cuando uno ve una película británica como Los caballeros de la mesa cuadrada, de los Monty Pyton (Monty Piton and the Holy Grial), obra maestra del absurdo, encuentra que escenas como el de la muchacha que es juzgada por brujería por pesar más que un ganso parecen sacadas de la vida real, porque todos conocemos gente que es capaz de hacer esas asociaciones. No sé como les dirán en Inglaterra a estos especímenes, pero sin duda se trata de pelotudos.
Así que haciendo un breve resumen podemos decir que el mundo está lleno (piense muy bien antes de preguntar "¿de qué?", no sea cosa que el subconsciente lo traicione).
Para finalizar, haremos un breve punteo.
El p. (y sí, repito que cansa, así que esta vez usaré abreviaturas) no piensa, hace.
El p. no dice, habla.
El p. no razona, opina.
El p. puede ser muy bueno en un área determinada, pero eso lo hace más peligroso, porque cree saber de todo.
El p. elije los foros donde pueda opinar de todo lo que no le preguntaron Y lo hará en proporción inversa a su conocimiento del asunto tratado. Elige preferentemente fútbol y política, más cuando tiene menos deportes que Utilísima y menos está dispuesto a hacer algo por cambiar el mundo.
El p. se ofende. Invariablemente. Hasta cuando uno le pregunta si tiene cambio.
El p. atrae a otros p. Mucho más si tiene un programa de radio. Entonces el p. oyente termina con la radio a todo volumen, importándole muy poco el resto del universo.
Como conclusión de lo anterior, el p. es básicamente egoísta.
El p. rara vez se sentirá identificado cuando uno hace una descripción de lo que es un p.

Por último, agradezco muchísimo su atención y complicidad. Después de escribir este artículo, me siento un poco más pelotudo, pero por el último punto sé que todavía no del todo.

domingo, 3 de julio de 2016

Relojes

Duermo bajo un cielo
de inevitables relojes
que bailan una sinfonía primordial.
Dios es un coreógrafo, quizás,
o un relojero, un matemático poeta.

Me deslizo en el breve tiempo
y trato de hacerlo con elegancia,
pero no es mi elemento y desentono en la canción.
Arriba los relojes ríen su mecánica metálica.
Inalcanzables como utopías
ignoran mis pequeños deseos
o tal vez los cumplen a su modo
metálico y perfecto.

Debo reconocerlo:
El Universo no conspira contra mí;
sólo me ve transcurrir inadaptado,
como un pato en un desfile de unicornios.
Sentarme, contemplar, fluir, luchar.
A lo mejor comprender y no intentar predecir,
y agradecer cada maravilla.
El Universo es un espejo
de la noche interna que me gobierna.

Se vislumbra,
allá,
el final de la caída;
o tal vez otro comienzo, no lo sé.
Volver a empezar, quizá como unicornio
en un desfile de patos.
Dios es un coreógrafo
de imprevisibles relojes.




lunes, 27 de junio de 2016

héroes

Nada crece a la sombra de los héroes.
Solamente florece sobre la memoria
de mujeres y hombres que sangraban y reían,
y nos hicieron llegar tan lejos como nuestros sueños.

Nada crece a la sombra de los héroes.
Los condenamos a la inmortalidad
de las mentiras que cuentan juglares a sueldo,
de sucios mercaderes de mitos.
Los/ nos condenamos,
a un mañana sin leyenda, a grises días.

Nada crece a la sombra
de las mentiras de boliche.

Dicen que Artigas no quiso volver,
dicen que Obdulio bebió con los vencidos.
Algún mediocre los hizo mitos.
Los/ nos condenó a la sombra.

En una plaza florecen niños
alejados de cantos de ciegos que nunca
conocieron el barro
de las batallas.

jueves, 9 de junio de 2016

Necesito

Necesito poesía.
No me importa si está escrita, o late bajo una piel tibia.
Necesito urgentemente poesía que me abrace,
que me lea, que me rime, que me alitere.

Necesito poesía como un poseso,
como el aire, como cada noche
necesita un día.

Necesito poesía para poder seguir,
para limpiarme la mirada,
para no odiar cada paso,
para no sentir cada mañana como una traición.

Y entonces veo tus ojos,
cansados, limpios, futuros.
Y respiro cada verso,
y rimo cada beso,
y se vuela,
de amarillos papeles,
como un ángel de estreno,
la poesía.


jueves, 2 de junio de 2016

érase una vez

Érase una vez maldita
donde se encontraban las voces negadas
por las veces anónimas en que callaban.
Érase una maldita vez
donde los hechos ocurrían
después de tantas veces postergadas.

Érase la vez como un embudo de los tiempos,
donde se encontraban las voces, los sucesos,
los infinitos instantes amputados,
para ser
por vez primera.


jueves, 19 de mayo de 2016

bosque

L'homme y passe à travers des forêts de symboles
Qui l'observent avec des regards familiers.
 
Baudelaire


me pierdo para encontrarme
en un bosque de signos,
un mandala que me integra y me refleja
como un espejo que abraza mi corazón.

todo sucede en el instante detenido
como una fotografía del impulso.
esa paz,
esa carrera,
ese vuelo de paloma desde el plexo hacia el sol.

tomo un segundo,
respiro y pronuncio.
afronto el día,
avanzan mis pies por el camino.
me pierdo
para encontrarme.