Nada puede ser afirmado con certeza
solo se puede proyectar
el amor, el odio, el deseo
como piedras que nunca
podrán alcanzar el cielo.
Nada puede ser dicho
sin que las palabras traicionen
su raíz, inefable huella
que se desvanece en nuestra lengua.
“La condición esencial para
ser un hombre práctico es la ausencia de sensibilidad”
F. Pessoa.
J. M. Serrat.
conviene ser cibernético,
vivir con ritmo frenético
pensando siempre lo táctico.
Para un discurso didáctico
conviene sentirse eufórico,
dominando lo teórico,
firmando con un seudónimo;
pero jamás ser anónimo,
ni mucho menos folclórico.