No puedo ser
elegante en la tormenta.
No puedo ser neutral
cuando mis ojos arden
en la hoguera de las pesadillas.
Soy
extranjero
en toda tierra.
Pero mis labios besan
la sal regada
sobre los surcos.
Soy extranjero,
mis labios deben callar,
pero han bebido
demasiada sal
Hay ríos de lágrimas y sangre
luego de la tormenta.
es un lujo obsceno
ser
elegante.
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